Resumen. Irán y Catar iniciaron la construcción del túnel submarino más largo del planeta, con 190 km de extensión, superando ampliamente al Eurotúnel. Conectará Catar con el sur de Irán, impulsando el comercio regional y la cooperación estratégica. La obra enfrenta grandes retos técnicos y marcará un hito en ingeniería e integración en Medio Oriente.
Irán y Catar han dado inicio a un ambicioso proyecto de infraestructura: la construcción del túnel submarino más largo del mundo. Esta impresionante obra conectará ambos países bajo el Golfo Pérsico, marcando un hito en la ingeniería mundial.
El túnel, que contará con vías férreas de alta velocidad, no solo facilitará el transporte de personas y mercancías, sino que también fortalecerá las relaciones comerciales y estratégicas entre Oriente Medio y Asia.
Con una longitud estimada de más de 40 kilómetros, este megaproyecto busca impulsar el desarrollo económico de la región, reduciendo tiempos de traslado y abriendo nuevas oportunidades de inversión y turismo.
La construcción del túnel submarino entre Irán y Catar posiciona a ambos países en la vanguardia de la innovación, apostando por obras de gran escala que transformarán el mapa de la conectividad global.