El merchandising político tras un atentado es una estrategia inapropiada y poco ética

Sabemos lo que pasó con el candidato y expresidente de Estados Unidos, Donald Trump. Videos e imágenes aparecieron en todos los medios de comunicación y el suceso se convirtió en tema de conversación en todas partes.

Sin embargo, lo preocupante es que estas imágenes impactantes del incidente ahora están siendo explotadas para la creación y venta de productos de merchandising con el fin de recaudar fondos para la campaña electoral de Trump.

Utilizar un evento tan grave y lamentable como un atentado, donde además hubo víctimas mortales, para fines de lucro o para recaudar fondos para la campaña es profundamente antiético. Transforma una tragedia en un simple objeto de consumo en lugar de fomentar una reflexión seria y unida sobre la violencia política.