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Resumen. Marcas emergentes como On y Hoka están revolucionando el mercado deportivo con innovación y tecnología avanzada, ganando terreno frente a gigantes como Nike y Adidas, que enfrentan desafíos por estrategias tradicionales. On destaca con suelas ultraligeras fabricadas por robots y un crecimiento del 32% en ventas, mientras las nuevas marcas aprovechan el auge del running para redefinir la industria.
En 2010, Olivier Bernhard, un triatleta suizo, creó las primeras zapatillas On al pegar mangueras de jardín a la suela de sus zapatos para mejorar la amortiguación. La idea fue tan exitosa que decidió fundar la marca junto a dos amigos. Hoy, On tiene un valor de mercado de $17 mil millones, con ventas que crecieron un 32% en el último trimestre y casi $2 mil millones en ingresos el año pasado.
El nuevo desafío de Nike y Adidas
Aunque Nike y Adidas siguen liderando el mercado global de ropa deportiva, su dominio ha disminuido. En 2018 sumaban el 63% de las ventas de las 15 principales marcas; en 2023, su cuota conjunta bajó al 51%. Mientras tanto, marcas como On, Hoka y otras firmas chinas como Anta y Li-Ning están ganando terreno.
Las zapatillas deportivas son el corazón del mercado, representando el 68% de las ventas de Nike y el 58% de Adidas. Entre 2018 y 2023, las ventas globales de calzado deportivo crecieron casi un 50%, impulsadas por la popularidad del running, especialmente tras la pandemia. Eventos como los maratones de Nueva York y Londres, con 55,000 participantes cada uno, reflejan esta tendencia.
Los clubes de running se han convertido en espacios sociales para jóvenes, fomentando conexiones y relaciones. El auge de la moda casual también ha incrementado la demanda de zapatillas, que ahora son comunes incluso en oficinas. Este crecimiento ha dado oportunidades a marcas emergentes, facilitado por barreras de entrada bajas y acceso a proveedores en Asia. Redes sociales y patrocinios accesibles también impulsaron su éxito.
Innovación como estrategia
Marcas como Hoka y On destacan con diseños innovadores, como las suelas gruesas de Hoka o las zapatillas ultraligeras de On fabricadas con fibra termoplástica. Mientras tanto, Nike y Adidas enfrentan críticas por rezagos en I+D y errores en distribución, priorizando ventas directas sobre minoristas. Esto permitió a nuevos competidores ocupar su espacio en tiendas.
Aunque Nike y Adidas buscan recuperarse con nuevos productos y estrategias, las marcas emergentes están expandiéndose hacia moda y ropa deportiva, como On con su colaboración con Loewe y su campaña con Zendaya. Sin embargo, el equilibrio entre innovación y diversificación será clave para su sostenibilidad a largo plazo.
📌Fuente: The Economist.
