Resumen. El gobierno de EE. UU. firmó un contrato de $29,8 millones con Palantir para desarrollar ImmigrationOS, una plataforma que rastrea datos biométricos y de geolocalización de inmigrantes. El sistema ha sido duramente criticado por vulnerar derechos humanos y fomentar discriminación. Amnistía Internacional y expertos alertan sobre el riesgo de un control social total.
La administración Trump ha contratado a Palantir Technologies para desarrollar InmigrationOS, un sistema de vigilancia diseñado para monitorizar exhaustivamente a inmigrantes en Estados Unidos. Esta plataforma integra datos biográficos, biométricos y de geolocalización, permitiendo un seguimiento detallado de las actividades de los migrantes.
Con una inversión de$30 millones de dólares, InmigrationOS busca optimizar los recursos del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), facilitando la identificación y deportación de individuos que hayan excedido su visa o estén vinculados a organizaciones criminales. El sistema prioriza la eficiencia en la selección de objetivos para detención y deportación.
Sin embargo, esta iniciativa ha generado preocupación entre defensores de derechos humanos, quienes advierten sobre posibles violaciones a la privacidad y el riesgo de discriminación. Expertos señalan que el uso de tecnologías de vigilancia masiva podría afectar no solo a inmigrantes, sino también a ciudadanos estadounidenses.
InmigrationOS representa un paso significativo en la implementación de políticas migratorias más estrictas, reflejando la visión de la administración Trump de ejercer un control absoluto sobre la inmigración mediante herramientas tecnológicas avanzadas .